Estos cambios podrían significar una reducción promedio del 20% en el salario neto, afectando más a quienes ganan más de 2 millones de pesos.
A partir de enero de 2024, los empleados en relación de dependencia podrían experimentar transformaciones en el Impuesto a las Ganancias, según un proyecto de ley revelado por Clarín. Este propone que los trabajadores comiencen a tributar desde salarios brutos mensuales de $976.516, con impuestos sobre el excedente del Mínimo No Imponible (MNI).
Según Gabriela Russo, del Consejo Profesional de Ciencias Económicas, y César Litvin, tributarista, estos cambios podrían significar una reducción promedio del 20% en el salario neto, afectando más a quienes ganan más de 2 millones de pesos.
El proyecto busca derogar la Ley 27.525, eximiendo del impuesto a trabajadores que ganan menos de $1.980.000 brutos. Esto afectaría a alrededor de 1.5 millones de trabajadores, con alícuotas que podrían llegar al 35%. La derogación podría aumentar la cifra debido a posibles incrementos salariales en 2024. El proyecto contempla ajustes anuales desde 2024 vinculados a la variación anual de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) hasta octubre del año anterior.
En cuanto al MNI, fijado en $1.980.000 en octubre, se busca derogar la actualización a $2.500.000 prevista para enero de 2024. Esto, junto a la derogación de la exención para la mayoría de los asalariados, podría explicar las afirmaciones del Ministro de Economía, Luis Caputo, sobre la mejora en la recaudación del impuesto a las Ganancias. La ley actual fue ratificada para 2024 con el respaldo de Javier Milei, argumentando que contribuía a reducir la carga impositiva para el 98% de los trabajadores asalariados.
