El Gobierno Nacional ha comenzado la distribución de 465 mil kilos de leche en polvo a punto de vencer, siguiendo un mandato judicial.
Esta medida responde al almacenamiento prolongado de estos alimentos en dos galpones del Ministerio de Capital Humano, cuya liberación fue ordenada para evitar su desperdicio. En el nordeste argentino, Chaco es la provincia que recibirá la mayor cantidad con 39.100 kilos, mientras que Corrientes obtendrá 9.400 kilos, destinada a los comedores y merenderos gestionados por la Cooperadora de la Nutrición Infantil (Conin).
Corrientes se encuentra en una posición desfavorable en comparación con otras provincias en términos de cantidad recibida. Esta distribución desigual también deja sin provisión a Misiones y Formosa, que no recibirán ningún cargamento de leche en polvo. A nivel nacional, Mendoza encabeza la lista con 191 mil kilos, seguido por Entre Ríos con 92 mil kilos y Tucumán con 69 mil kilos.
La distribución de la leche en polvo está restringida a los comedores afiliados a la Fundación Conin, excluyendo a aquellos que no están bajo su órbita. Esto ha generado críticas entre las organizaciones sociales y comedores comunitarios que quedan fuera del reparto y que también necesitan de estos recursos para atender la demanda alimentaria.
Otras provincias como Córdoba, Santa Fe, y Buenos Aires recibirán cantidades menores, con Buenos Aires obteniendo apenas 5.993 kilos, una cantidad ínfima considerando su población. Provincias como Tierra del Fuego, Río Negro, Salta, San Juan, La Pampa y Santiago del Estero también recibirán cantidades reducidas. La decisión de la Justicia de ordenar la distribución inmediata busca evitar el desperdicio de alimentos, aunque la desigualdad en la asignación ha suscitado controversia.
