El expresidente de EE.UU. sorprendió con duras declaraciones sobre la crisis argentina y deslizó un posible apoyo con la reactivación de importaciones de carne vacuna.
En una declaración que sacudió tanto al ámbito político como económico, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, realizó este domingo polémicos comentarios sobre la situación actual de Argentina, calificándola como “desesperante”.
Durante una charla con periodistas a bordo del avión presidencial Air Force One, Trump aseguró que su gobierno está evaluando la posibilidad de reanudar la compra de carne vacuna argentina, lo cual podría significar un alivio para el golpeado sector agroexportador del país sudamericano.
Sin embargo, el anuncio vino acompañado de una descripción descarnada de la realidad argentina: “Están muriendo. ¿De acuerdo? Están muriendo”, dijo el exmandatario, en referencia a la profunda crisis económica que atraviesa la nación.
“Argentina está luchando por su vida. ¿Entienden lo que eso significa? No tienen dinero, no tienen nada, están luchando muy duro para sobrevivir”, agregó Trump, con su estilo directo y sin filtro.
El líder republicano, que mantiene una relación cordial con el presidente argentino, señaló que su eventual ayuda responde también a esa afinidad personal. “Me agrada el presidente de Argentina. Creo que está tratando de hacer lo mejor que puede”, expresó.
Las declaraciones no tardaron en generar repercusiones tanto en Washington como en Buenos Aires, donde analistas interpretan el mensaje como una mezcla de advertencia, respaldo y presión externa. Mientras tanto, el mercado agropecuario argentino sigue de cerca la posible reapertura de exportaciones a uno de los destinos más codiciados del mundo.







