En un encuentro con más de 100 comediantes, actores y escritores; el papa Francisco consideró que no está mal bromear con Dios «siempre y cuando la broma no sea ofensiva”.
«¿Podemos reírnos también de Dios? Por supuesto, no es blasfemia, podemos, igual que jugamos y bromeamos con las personas que queremos», indicó el sumo pontífice.
De todas formas, aclaró que el humor no debe «ofender, humillar ni despreciar a las personas por sus defectos».