Victoria Villarruel, titular de la Cámara de Senadores, busca involucrarse en la causa judicial por los destrozos ocasionados en el Congreso durante la manifestación contra la Ley Bases, presentando una denuncia para ser querellante.
La presidente de la Cámara de Senadores, Victoria Villarruel, tomó la decisión de presentar una denuncia ante el Juzgado de la jueza María Romilda Servini, solicitando ser parte querellante en la causa que investiga los daños ocurridos en el Congreso durante la protesta contra la Ley Bases.
La demanda tiene dos frentes. Por un lado, se centra en los destrozos sufridos por los edificios históricos, principalmente en el Anexo de la Cámara de Senadores, ubicado a escasos 100 metros del recinto legislativo. Por otro lado, la denuncia también apunta a la presunta intención de los manifestantes de obstruir el normal desarrollo de las actividades legislativas, en línea con los dichos del Gobierno nacional que ha calificado los incidentes como actos de «terrorismo» y «golpe de Estado».
El debate sobre la situación se extendió incluso dentro del recinto legislativo, donde la vicepresidente de la Nación, Victoria Villarruel, y el senador Eduardo Wado de Pedro protagonizaron un intercambio respecto a la propuesta de realizar un cuarto intermedio para que una comisión de senadores saliera a observar lo que ocurría en las calles. Aunque la idea contaba con el respaldo de otros bloques, Villarruel se negó a habilitarla, argumentando que las manifestaciones buscaban «hacer caer» la sesión.
Hasta la mañana de hoy, la justicia mantenía detenidas a 35 personas por los disturbios y daños registrados durante las protestas contra la Ley Bases. Se esperaba que durante el día se llevaran a cabo las indagatorias en los tribunales de la avenida Comodoro Py, con la jueza María Romilda Servini y el fiscal Carlos Stornelli a cargo del expediente, según confirmaron fuentes judiciales.
